En repetidas ocasiones hemos mencionado que el poker es un juego de adaptaciones, en el cual los jugadores que son capaces de variar su forma de jugar en diferentes situaciones podrán sacar mayores beneficios del resto de rivales.

Es cierto que cada jugador tiene sus características propias, de modo que tendremos jugadores loose o tight, y también jugadores agresivos o pasivos. Digamos que cada jugador intenta encontrar el estilo en el cual se encuentra más a gusto con su juego, y a partir de ahí lo desarrolla. Aun así insisto en que adaptar nuestro juego nos hará ganar mucho más, de modo que ser loose o tight no es una opción fija, si no que podremos cambiarla dependiendo de diversos factores. Lo mismo sucede con el juego pasivo o agresivo. Veamos algunos de los factores que nos pueden afectar a la hora de escoger jugar de alguna de estas maneras.

– Perfil de nuestros rivales: adaptarse a nuestros rivales es capital para poder sacarles el mayor rédito posible, y aprovechar sus errores. De este modo teniendo en cuenta el perfil del rival contra el que nos enfrentamos, adaptaremos nuestro juego hacia el lado agresivo o pasivo, vamos con algunos ejemplos que seguro nos ayudarán a entenderlo mejor.

1) Loose agresivo: estos rivales son propensos a meterse en muchos líos, sus rangos son amplios, no les gusta foldear e intentarán farolearnos cuando tengan la ocasión. Frente a estos rivales vamos a adaptarnos fortaleciendo nuestros rangos desde el preflop, de modo que no atacaremos sus ciegas con demasiada frecuencia. También intentaremos inducir acción pasando con manos medias/fuertes que fuercen situaciones en las cuales nos quieran farolear.

2) Loose pasivo: este es un perfil de jugador bastante débil, el cual tiene rangos amplios, pero su juego se limita a ver las siguientes cartas. Frente a estos jugadores debemos ser agresivos, utilizando en muchas ocasiones secuencias de varias apuestas con nuestras manos fuertes, ya que estos rivales no tendrán problema en seguir pagando si ven que su mano tiene cierto valor. Su pasividad también nos permitirá llevar nuestras manos medias al showdown, lo que siempre es beneficioso.

3) Tight agresivo: este es el perfil de rival que más problemas nos va a causar a priori. Su juego tight le permite tener rangos fuertes en multitud de ocasiones, unido a buenas dósis de agresividad, hará que tengamos problemas para continuar en la mano con nuestras jugadas medias. Frente a estos rivales, que sin entrar en profundidad no tienen demasiados fallos en su juego, será contra los que menos líos queremos tener. Nuestro objetivo frente a ellos es el de jugar manos con iniciativa en la mayor parte de los casos, de modo que así frenaremos un poco su agresividad.

4) Tight pasivo: estos jugadores son los llamados nits, aquellos que juegan un rango de manos muy selectivo, pero a pesar de ello no son muy agresivos. A estos rivales debemos explotarlos atacando muchos botes frente a ellos, y dando por perdidas las manos en las cuales muestren fuerza. Debemos tener en cuenta que a este perfil si nos adaptamos podemos ganarle muchos botes pequeños sin demasiada oposición, pero en cambio cuando el tamaño del bote crece, también crecen sus posibilidades de tener una mano fuerte, por lo que debemos tener especial cuidado en esas situaciones.

– Situación de la partida: esto se suele aplicar más a los torneos que a las partidas de cash, ya que los torneos pasan por diferentes fases que nos permiten adaptar nuestro juego a las mismas dependiendo de la etapa en la que nos encontremos, cual es nuestro stack y nuestra situación con respecto al resto de la mesa.

1) Primeras fases del torneo: en estas fases los stacks suelen ser bastante parecidos. El valor de las fichas en este punto no es tan elevado como en fases posteriores, lo que por un lado nos indica que el beneficio de ganar muchas fichas en estas fases no es tan elevado como si lo hacemos en las fases finales del torneo. Por otro lado también podemos deducir que el coste de quedar eliminado en esta fase del torneo no es elevado, aunque esto no quiera decir que tengamos que tomar demasiados riesgos que en muchas ocasiones derivarán en una eliminación temprana. En esta fase del torneo creo que lo mejor es adaptarse al juego que se está desarrollando y sacarle el mayor beneficio. De este modo en una mesa pasiva nos vendrá bien jugar agresivo los botes pequeños, y no meternos en demasiados problemas en botes grandes si nuestra mano no es legítima. En mesas agresivas debemos seleccionar bien los spots en los cuales queremos sacar beneficios y tener en cuenta que de media arriesgaremos mucho más para ganar botes. En estas fases tener un stack grande no es demasiado relevante, ya que como he dicho antes, el beneficio de eliminar jugadores no es significativo. Por otro lado tampoco debe ser un drama si nuestro stack se ve mermado a las primeras de cambio, ya que en la mayoría de torneos tenemos margen de maniobra suficiente como para recuperarnos sin tomar excesivos riesgos.

2) Burbuja de premios: se trata de una fase en la cual debemos empezar a tomar riesgos. Ahora sí que hablo de riesgo real, ya que el coste de quedar eliminado en este punto es más elevado que en las etapas iniciales. En este punto es de capital importancia tener en cuenta nuestro stack relativo al del resto de rivales. Esto es más importante incluso que el stack que tenemos con respecto al torneo, ya que los stacks de nuestra mesa son los que van a poder atacar al nuestro y viceversa. En esta fase los jugadores deben adaptar su juego hacia una vertiente más agresiva en los casos en los que sus stacks sean los mayores o los menores. En el caso de los stacks mayores, todos hemos vivido burbujas de premios en las cuales los stacks más grandes dominan la mesa, abriendo un mayor número de manos y atacando a sus rivales sin piedad. Esto es debido a que un stack dominante amenaza a los stacks menores con una posible eliminación, lo que hace que estos tengan que intentar no equivocarse jugando frente a los líderes. Como he comentado más arriba, es importante saber el stack relativo con respecto al resto de la mesa, ya que si por ejemplo nuestro stack es el tercer mayor del torneo, pero los dos primeros están en nuestra mesa, debemos medir buien nuestra agresividad, ya que el coste de quedar eliminado en este punto es altísimo. He comentado que los stacks más cortos también pueden ser agresivos en este punto, ya que el coste de su eliminación no es tan elevado como si tenemos un stack mayor, debemos tener en cuenta que si la estructura de premios normal nos hace cobrar entorno al doble del buyin, podemos arriesgar un poco más de la cuenta buscando una posición más privilegiada de cara a la etapa post burbuja. En los satélites, dada su estructura de premios particular, estas hipótesis cambian, y el beneficio de seguir vivo hasta llegar a premios es mucho mayor que el de un torneo convencional, por lo tanto debemos tener en cuenta que lo que prima es la supervivencia por encima de contruir un buen stack, ya que el torneo se acaba una vez se rompe la burbuja.

3) Mesa final: en esta última etapa de los torneos los saltos de premios suelen ser significativos. Aquí entra en juego el ICM y los costes de confrontación entre stacks son mayores. Sin entrar muy en profundidad nuestro objetivo debe ser el de presionar a los stacks que sean menores que el nuestro, ya que son ellos los que deben poner su torneo en juego frente a nosotros. Debemos tener en cuenta que cuanto mayor sea el stack (que a su vez sea menor que el nuestro) del rival, más presión estamos metiendo, ya que el precio de acabar noveno siendo por ejemplo el tercer stack de la mesa final, es muy alto, tanto que a veces es mejor dejar pasar spots con un EV positivo a cambio de mantenerse con vida en el torneo. En cambio si estamos en última posición, no debemos dejar escapar opciones de ganar fichas, ya que el coste de quedar eliminados en esta situación es asumible a cambio de un posible aumento considerable de nuestro stack, tenemos mucho que ganar, y no tanto que perder.

Espero que les haya servido de ayuda estos consejos, y que recuerden que saber adaptarse es una característica importante de los jugadores ganadores.

¡Saludos!

Por: Jorge Coello

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