Mucho se dice sobre los hechos que le ocurren a una persona a temprana edad que condicionan el resto de su vida. En el poker se podría decir que pasa igual. Los jugadores principiantes pueden probar distintas modalidades de juego, sin embargo deberían enfocarse rápidamente en una. 

El común denominador de personas que comienzan en el poker lo hacen mediante torneos freeroll o Sit&Go que suelen ser una buena opción de crea banca, luego conocen el cash game, partidas rápidas tipo zoom y nuevos juegos como Ohama y es justo ese «multitasking de poker» lo que afecta el rendimiento y crecimiento de un jugador a lo largo de su carrera. Si bien es válido probar distintas modalidades de juego, lo recomendado es elegir solo una para dedicarse a ella. Cuando un jugador es ganador y luego de años de experiencia en una modalidad se podría tomar el reto de diversificar. 

Es muy frecuente ver a jugadores que luego de salir eliminados de un torneo en vivo se pasan a las mesas de efectivo para «tratar de recuperar» o por las ganas de jugar, igual los jugadores de cash online que deciden participar en el gran festival en línea con un garantizado histórico.

El metajuego en el poker es fundamental, tener una estrategia sólida e irla mejorando con el tiempo es el camino al éxito por ello hay que tener presente el refrán que reza «aprendiz de todo, maestro de nada». Estar jugando un torneo de Texas Holdem con ciegas tan variantes y a la vez tener abiertas dos mesas de cash, con toda seguridad mermará los resultados.

El que persigue dos liebres no atrapa ninguna, así que por muy tentador que sea el torneo de la semana que viene en el casino o sala favorita, así como la increíble promoción para mesas de cash, se deben escapar de todas estas situaciones y estar dedicado, enfocado y con la mira puesta en una sola forma de juego.