El Casino Iguazú ya se transformó en la segunda casa de Raúl Doutrelau . Todo un regular del Cataratas Poker Tour, el paraguayo de 78 años no se pierde ningún evento y por eso, posiblemente, sea uno de los merecedores más grande de lo que le sucedió: se consagró campeón del impresionante Super High Roller US$500k garantizados que se jugó el último fin de semana.

Allí, en la Triple Frontera y enclavado en la geografía de una de las Siete Maravillas Naturales del mundo, este torneo fue soñado y se transformó en uno de los más grandes de la historia de Argentina ya que superó el bote asegurado y repartió 853.200 dólares, de los cuales US$124.930 fueron para Doutrelau, quien fuera presidente del club Cerro Porteño de 1992 a 1994.

Don Raúl, con el trofeo del Super High Roller

«Esto lo venimos soñando desde que inició en febrero. Cada uno se hacía la ilusión de ganar este Super High Roller y por eso siento tanta satisfacción. Esto me llena como deportista», asegura Raúl, que se transformó en el segundo paraguayo con más cobros en vivo detrás de Gustavo Soler .

¿Qué significa este título para usted?
-Un gran orgullo, una gran satisfacción, los que estamos en Iguazú somos como una familia de argentinos, brasileños y paraguayos, es una fiesta para todos. Les quiero agradecer a todos, sobre todo a mi señora que me espera despierta en la habitación.

¿Y haber quedado como el segundo paraguayo con más cobros en vivo?
-Es una satisfacción para nosotros los paraguayos que estamos compitiendo con Brasil y Argentina, donde hay tantos torneos. Nosotros tenemos pocas oportunidades, así que hay que aprovecharlas. Ya fuimos a Panamá y ahora nos iremos a Barcelona…

La V de la victoria en la foto de la mesa final

¿Cómo es competir contra tantos jóvenes y jugar sesiones de 14 horas a los 78 años?
-No tengo dudas de que el poker es un deporte y a mí lo que me apasionan son los torneos, eso me mantiene con mucha energía. La emoción de competir te hacer sacar energía de cualquier parte, la adrenalina está corriendo, te mantiene vivo y despierto.

¿Qué significa el poker para usted?
-Este juego es un deporte y como te decía, a mí me da muchas vivencias y energía. Me ayuda a mi desarrollo y sobre todo me hace estar bien de la mente. Tanto como el trabajo, esto me mantiene compitiendo con jóvenes que están con todas las luces. Por eso este título es verdaderamente un triunfo.

¿Qué le pareció el torneo? ¿Cómo lo fue viviendo?
-El primer día no fue tan satisfactorio para mí, pasamos arrastrándonos, pero ya el segundo estuvo bastante mejor. Me tenía mucha confianza, llegué con las pilas bien cargas, así que el Día 3 fue todo crecimiento. Y sobre el torneo, la verdad es que no esperábamos tanto: resultó una maravilla, ni una crítica, nada… Fue maravilloso, bien planeado, hasta la decoración… Una fiesta para todos.

¿Qué va a hacer con el trofeo?
-Va a estar en el centro de todos los trofeos de mi galería. Tengo más de 40.