La bandera colombiana estuvo presente este domingo en la mesa final del Evento Principal, categoría Medium, del PowerFest, convocado por partypoker. Desde Ibagué, Mario David Velásquez , dio la batalla en el certamen, hasta caer en el octavo lugar. El pijao se adjudicó así una generosa recompensa de 9.490 dólares, que pudo llegar a ser mucho mayor de escalar algunos peldaños más. El título del torneo, identificado como evento 48-M del festival de la sala del rombo naranja, fue para el maltés agrocomedio , quien se embolsó 153.350 americanos. Su escolta, el británico sentapied99 , se llevó 107.050 de los verdes y su compatriota westcourtboy recibió u$d 68.700 por su tercer lugar. La competencia reunió a 4.512 contendientes, que pagaron una inscripción de u$d 215, en busca de un pozo de 1 millón de dólares garantizados.

Velásquez alcanzó este notorio cobro luego de acceder al evento gracias a un tiquete de registro que obtuvo en un clasificatorio de 22 dólares. Aunque en principio quiso buscar la forma más factible de hacer efectivos esos 215 verdes, para lo cual pensó en jugar un heads up, el grinder terminó por escuchar a sus amigos, que le indicaron que ya era hora de asumir un reto de este tipo en las pantallas, luego de meses de intenso estudio y práctica en los paños virtuales: «Me convencieron de meter un torneo, ya que no soy jugador frecuente de multimesas; mi modalidad es el cash-game. Me decidí a buscar un buen evento del PowerFest y encontré éste, con una maravilla de estructura y en el que el buy-in coincidía con el valor del ticket que había ganado. Me inscribí dos semanas antes, con toda la fe puesta en que llegaría al dinero», detalló el ibaguereño.

Sin embargo, esa anticipación con la que aseguró su presencia en esta masiva competición, en principio le jugó en contra a Mario. A la hora en la que sus fichas fueron puestas en juego, Velásquez estaba completamente desentendido del inicio del evento: «Me fui a almorzar con mi familia, a un sitio retirado de la ciudad. Pensé que iba a poder jugar desde el celular mientras regresaba a Ibagué, pero no tuve acceso a internet, así que solo pude conectarme al software al volver a casa, como a las 5 de la tarde . Al hacerlo encontré que solo tenía 20.000 fichas de las 100.000 iniciales y el torneo ya estaba tan avanzado que eran escasas 7 ciegas. La verdad estaba tan relajado que olvidé la importancia del torneo y estuve cerca de perder una gran oportunidad», confesó el entrevistado.

Pero el azar le tenía reservado un camino lleno de sorpresas a Mario. Casi tan pronto como empezó a jugar recibió cartas que lo llevaron a spots favorables y lo encaminaron hacia los puestos de cobro: «Recibí par de reyes dos veces consecutivas y luego unos ases. Así me tripliqué. Me dispuse a tomar el torneo con toda la concentración y volví a doblarme para llegar a unos 130.000 puntos, que ya representaban 32 ciegas. Luego, todo se fue dando. Gané un flip muy importante con AK off. El jugador del HJ abrió con raise a 2,2 blinds y yo me jugué con las 18 ciegas que tenía. El rival pagó y enseñó par de reinas. Conecté el rey en flop y el As en turn. Ahí subí mi cuenta a 40 blinds y empecé a moverme y a aprovechar spots favorables para llegar a un stack cercano a las 60 ciegas», avanza en su relato el protagonista.

A esas alturas, el objetivo inicial de Mario, que era alcanzar los cobros, ya parecía ser poco. Las buenas decisiones y los aciertos que le ratificaba la varianza, llevaron al grinder a convencerse de que la jornada estaba para mucho más: «Metí un badbeat ya en burbuja de cobros y me ubiqué bien. Ya eran como las 11 de la noche y mis amigos empezaron a seguirme en el torneo y a enviarme buenas energías. Entonces vino una serie de manos buenas, y, como solemos decir en mi ciudad, ‘les hice la rara’ (meter un cobro; lograr una figuración destacada). Cuando mi stack ya estaba cerca de los 4 millones de fichas, gané un bluff gigante. En guerra de ciegas, defendí la mayor con A2 off, luego de un raise del small. El flop trajo Q-Q-9 y cubrí la apuesta de continuación del rival. Al turn llegó un 7 y él pasó. Decidí apostar y él hizo call. Al river llegó un brick y lo puse all-in, luego de que pasara. Foldeó y con ese pozo quedé muy fuerte y motivado», detalló Velásquez, como volviendo a vivir la jugada.

En la etapa final del torneo, el colombiano actuó de una manera un poco más prudente: «El torneo siguió su rumbo normal y opté por una línea de juego bastante tight. Prácticamente, gané en cada spot en el que llegaba al river. Sin embargo vinieron unas manos seguidas en las que no tuve suerte. Me afectó el cambio constante de mesas, que me dejó sin estadísticas de los rivales y por eso opté por ser más conservador. Tenía toda la disposición para ganar, pero al conformarse la mesa final ya solo tenía 16 ciegas y me fui quedando cada vez más corto. En mi última mano me encontré precisamente con el otro shortstack de la mesa. Él shoveó y yo recibí con AQ suitte, en el cut off. Me quedaban 10 ciegas en ese momento. El rival enseñó par de ochos. Al flop vinieron K-10-x, pero no logré conectar un par o completar la escalera, así que terminé en el octavo lugar», finalizó el pijao.

Al preguntarle si esta gran actuación lo llevará a explorar con más frecuencia los torneos masivos, el grinder analizó: «Siempre he pensado que los torneos son un poco frustrantes, pero también me parecen muy competitivos y divertidos, por lo cual no me aburren; al contrario, me emocionan bastante. Creo que seguiré jugando constantemente, estudiando mucho el cash-game y luego intentaré mudarme a los torneos de buy-in medio. Pienso que debo focalizarme en estudiar para mejorar y seguir adelante. La idea es intensificar el volumen de juego este año».

Para lograr estos propósitos, Mario contará con el apoyo de la escuela Grinders Chile, a la que se vinculó tras presentarse a una convocatoria para obtener su bancaje en los paños virtuales: «Inicié con ellos hace unos 6 meses. Ellos me aportan banca y dividimos por mitades las ganancias que se obtengan», preciso Velásquez. El tolimense contó también que practica esta disciplina mental desde hace 10 años; pero solo viene siendo constante, tanto con el juego como en el estudio del mismo, en los últimos dos. A eso le atribuye sus progresos.

Para cerrar, el héroe reservó un espacio para expresar su gratitud a quienes lo han acompañado en su evolución en los paños: «Quiero aprovechar esta reseña para saludar a todos los amigos de mi ciudad, muy especialmente a Alexander ‘Tolax’ Arbeláez , Santiago Peña , Daniel Vergara , Sergio ‘Teo’ Torrese , Eduardo ‘Cope769’ Bernal , René ‘Frogrene’ Hernández , Erix Hans ‘La Nea’ Andrade , Álvaro Rivas y Fabián Pichara , de Grinders Chile», se despidió el invitado.