Promediando el segundo nivel de este viernes, todas las miradas del salón se fueron de los paños y se enfocaron en el rail. Damián Salas hacía su silenciosa entrada al Iguazú Grand Hotel & Casino acompañado por su hermano Matías, quien se dirigió directamente al asiento que lo esperaba para arrancar a disputar el Día 1B del Evento Principal de esta WSOP Argentina 2017. Por su parte, el Pampa iba a tener que sortear ciertos protocolos.

Losada y Niciforo no dejaron pasar su momento con el ídolo.

Para empezar, el organizador del encuentro, Luis Losada , tomó el micrófono y anunció la especial bienvenida y el agradecimiento a su presencia, saludo que fue recibido con una ovación de pie por parte de todos los jugadores. Además, muchos de ellos se acercaron para recibirlo personalmente, felicitarlo y hasta pedirle una foto. Sin dudas, un antes y un después en su popularidad tras convertirse en el mejor latino de la Era Moderna del Main Event.

El reencuentro de los dos grandes.

Ya ayer lo comentó Richard Dubini , el flamante embajador de partypoker: «Muchos brasileños que estuvieron en mi mesa me felicitaban y dijeron que, pese a ser argentino, hincharon y se entristecieron con mi eliminación». Algo similar seguramente ocurrirá con Salas, profesional de Aconcagua Poker, quien durante la conversación que tuvo en Facebook Live con CodigoPoker, comentó que en sus recientes vacaciones en Playa del Carmen, varios grupos de mexicanos lo reconocieron y saludaron.

Entre otros detalles, son varios los jugadores que empezaron a utilizar la muletilla «segura, segura» a la hora de esquivar cartas tras quedar all-in y, más aún, todos los que sueñan con imitar su proeza de romperla y llegar a la final de este torneo. Finalmente, Salas cayó en el nivel 8 y no tuvo la dicha de superar el corte, pero así le dio la posibilidad a nuevos rivales de enfrentarlo mañana y llevarse una nueva anécdota para sus vidas.