Los tiempos cambian, pero aún muchos piensan que poker y trabajo no son compatibles… Sin embargo el camino es arduo y por eso doblemente placentero. ¿Todavía recuerdan cuando le dijeron a sus familiares cuál sería su profesión?

Tras haber metido tres mesas finales por más de 26 mil dólares en cobros, desmenuzamos la parrilla de los torneos que tuvo que jugar para conseguirlo. El balance de lo que dejaron los 16 eventos.

Para un profesional, no todo debería girar alrededor de una mesa. Por eso es fundamental saber desconectarnos independientemente de que los resultados sean positivos o negativos.

Altibajos, situaciones contra las cuerdas, acumulación de estrés, premios millonarios y sesiones maratónicas de hasta 15 horas de juego convierten a los torneos en obstáculos difíciles de sobrellevar.

Muchos piensan que jugar al poker desde sus casas es una tarea sencilla, pero la carrera de un profesional está rodeada de actividades -y obligaciones- tanto dentro como fuera de las mesas. Un relato en primera persona.

Los tiempos cambian, pero aún muchos piensan que poker y trabajo no son compatibles… Sin embargo el camino es arduo y por eso doblemente placentero. ¿Todavía recuerdan cuando le dijeron a sus familiares cuál sería su profesión?